viernes, 30 de diciembre de 2011

PARLA, UNA CIUDAD QUE MIRA AL FUTURO


Estos días finalizamos un año especialmente duro que ha estado cargado de situaciones muy difíciles. Familias e instituciones hemos sufrido una terrible sacudida que nos ha obligado a replantearnos muchas de nuestras promesas y compromisos.

El tiempo avanza y debemos posicionarnos ante un futuro lleno de incertidumbres y a realizar un ejercicio de austeridad en las cuentas públicas de forma insólita si lo analizamos desde el punto de vista del momento en el que se aplica.

Ahora bien, no podemos caer en la melancolía de quien días tras día se regatea a si mismo en el terreno del diagnostico de lo que pudo ser y no fue. Tampoco podemos empeñarnos en buscar la pronta rentabilidad política a soluciones basadas en ‘no arrimar el hombro’ si tratamos de encontrar la mejor salida a esta situación. Las prontas mieles del triunfo se pueden trocar en la pesadilla de la hiel a corto plazo.

Quien me conoce sabe que lo que mi equipo y yo podemos y debemos aportar es hacer el mejor de los trabajos por aquello que más queremos, por Parla.

Lo hacemos por el lugar donde vivimos, siendo conscientes de que las ciudades son los pilares básicos para el futuro crecimiento de este país.

En Parla, en función de este principio, comenzamos un largo viaje que nos ha llevado hasta aquí para situar a la ciudad en las mejores condiciones. Un viaje realizado para posicionarla como una interesante opción en la segunda corona metropolitana de Madrid, una ciudad perfecta como receptora de inversión y de implantación industrial y comercial.

Hoy podemos decir que aunque en estos momentos en los que el nuevo Gobierno anuncia un periodo de recesión, los proyectos que pusimos en marcha para Parla –el Polígono industrial, el Mercado Municipal del centro de la ciudad y la zona de ocio en el barrio de Parla Este - son más reales ahora, al finalizar este año, y espero que rápidamente comiencen las obras de ejecución.

Seguiremos trabajando en nuevos proyectos, que continuarán haciendo de Parla la ciudad que reúna todas nuestras expectativas, individuales y colectivas. Expectativas y anhelos por los que tendremos que pelear, luchar y reivindicar.

Nunca nos han regalado nada y cuando hemos estado juntos nos ha ido mejor. Ha sido entonces cuando hemos conseguido nuestros propósitos, guiados por algo tan simple pero tan fuerte como es la justicia.

Espero que el próximo año sea aquel que pueda acoger nuestros deseos de prosperidad y felicidad. Por eso, para terminar, os dejo una preciosa cita de Nelson Mandela que refleja a la perfección ese espíritu que siempre nos ha guiado: “Después de escalar una montaña muy alta, descubrimos que hay muchas otras montañas por escalar”.

Feliz Año 2012